Definitivamente, la familia ocupa el primer agente de socialización de los niños y niñas, y su influencia es significativa en el desarrollo de su personalidad. Como docentes, tenemos la labor de completar y ampliar esas experiencias, colaborando estrechamente con las familias para garantizar el intercambio y la unidad en las actuaciones, todo ello con el objetivo de fomentar el desarrollo integral del niño. En resumen, la familia es uno de los pilares fundamentales dentro de la comunidad educativa.
Además, resulta crucial que los niños y niñas sean conscientes de la diversidad familiar. Para trabajar tanto la diversidad familiar como la participación activa de las familias en el proceso de enseñanza-aprendizaje en Educación Infantil, proponemos la puesta en marcha de actividades que fomenten la reflexión, el respeto y la comprensión de los diferentes tipos de familias. Algunas de estas actividades pueden ser:
- Elaboración y exposición de árboles genealógicos para explorar y comprender las raíces de cada niño y niña.
- "La mascota viajera conoce a nuestras familias": en esta actividad, un alumno llevará a casa la mascota de la clase durante el fin de semana, y junto con la familia, completarán el libro viajero donde relatarán algunas de las actividades que realizaron juntos.
- Talleres con padres: cada viernes, un padre, madre o tutor o tutora legal participará en un taller educativo, donde podrán compartir aspectos de su profesión o realizar actividades que consideren que puede ser interesante para realizar con los niños y niñas.
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